lacuestión

Archivo: mayo 2005 julio 2005 septiembre 2005 diciembre 2005 enero 2006 marzo 2006 mayo 2006 junio 2006 julio 2006 septiembre 2006 abril 2007 mayo 2007 agosto 2007 noviembre 2007 abril 2008 diciembre 2009 julio 2010 octubre 2010 marzo 2011 febrero 2013 mayo 2017 septiembre 2018 Free Web Counter visitas la blogoteca
La Cuestión se origina en Barranquilla, Caribe colombiano
viernes, julio 15, 2005
 
Un tema muy controvertido

Inconvenientes de la libertad

Por Carlos Rosales

Claro que las mujeres pueden hacer lo que quieren con su cuerpo: desde pintarse los labios, pasando por implantarse silicona y practicarse cirugía plástica, hasta ligarse las trompas. O vender sus servicios.

Sí, todo eso es cierto. Las mujeres pueden disponer se su propio cuerpo como mejor les parezca. Lo que no pueden hacer es elegir la suerte de otra persona por esconder las consecuencias de un acto más o menos placentero, o por eludir el más grande compromiso de su existencia, o por ambas cosas.

Hay excepciones, obviamente: un serio riesgo para la salud (de la madre o del niño), una violación, un caso de ignorancia total por retraso mental, etc. Pero básicamente las consecuencias del acto sexual son bien conocidas cuando la ley de probabilidades es caprichosa, y por lo mismo se debe asumir la responsabilidad de una necesaria prevención.

Un personaje de la mitología griega, hijo de Hermes y Afrodita (cuyo nombre ha servido para designar a aquellas personas que nacen con sexo indeterminado), que tenía el “privilegio” de gozar las mieles del placer de ambas partes, al ser consultado por alguien sobre el goce relativo de varón y hembra en el acto sexual, contestó que si él dividiera este goce en diez partes, nueve serían de la mujer y solo una del hombre (aunque es pura leyenda, nunca hay que subestimar el pensamiento de la Grecia antigua).

Si escogemos las más deseables de nuestras experiencias varoniles (que no son todas, por desgracia), podemos concluir que el goce deseable de las mujeres debe de ser una cosa, por decirlo de alguna manera, delirante.

¿Justifica esto, por agradable o (según la concepción liberal del asunto) permisible que sea, una actitud negligente e inmediatista, que derive en la comisión de un asesinato en el futuro? Porque es un asesinato. Tal vez al tenor de las leyes una persona natural es aquella que sale del vientre de la madre y se desprende del cordón umbilical, pero: ¿qué significa alumbrar, dar a luz? ¿Acaso que, antes de ver el mundo ese ser no tiene derecho legítimo de su existencia? ¿Cómo va a saber un abogado lo que siente un niño cuando es (literalmente, cual desafortunada víctima de atraco en una calle solitaria y oscura de Bogotá) chuzado y herido hasta la muerte?

Para mal o para bien, Dios les dio el don de tener los hijos a las mujeres. También le permitió (estoy totalmente convencido de lo que dice la leyenda griega) tener una pasión y un goce sexual incomparablemente superiores a los de su contraparte masculina, y por eso, quizás, también las dotó de un mecanismo de defensa presente en el temperamento de (casi todas) ellas, que les permite controlar ese impulso desenfrenado.


Los hombres se emborrachan, juegan, amanecen en la calle, van a las guerras, no tienen que explicar su promiscuidad (que nadie, salvo el cónyuge o su suegra, les censura), en fin, su condición les permite tener un carácter errante y vagabundo, y por todo eso se les tacha, con razón, de irresponsables. Pero no traen hijos al mundo. Las mujeres, generalmente (hay excepciones desde luego), no se permiten tantas libertades. Pero a veces pasa algo raro, y por eso pueden llegar a vender la vida de alguien que lleva su sangre a cambio de unos cuantos minutos de lujuria (que bien pueden venir después de un rato de sexo “no peligroso”).

En eso consiste la terrible cruz de su irresponsabilidad.
Bogotá, octubre de 1995.
Fotografía 1: Hermafrodita dormida. Fotografía 2: torso de Afrodita.
(Fotos: Mueso del Louvre. Caricatura: www.mscperu.org)

Comments:
Como dicen por ai en argentina la pagina esta "piola". Sigue por doncde vas pibe.
 
De acuerdo con el articulista. Todos los dias mueren miles de niños donde esta y donde no esta prohibido el aborto. Solo Dios sabe como pagara la humanidad tanta maldad.
 
Saludo señor Rosales.Gracias por la visita a la página.Dejeme recordale que tenemos una versión impresa de La Movida Literaria que se consigue en las librerías.Felicitaciones por su blog, pinta muy bien.
 
Hola felicitaciones, me gusta el blog, espero poder pronto enviarte algo para publicarlo aquí. director@publiensayos.cjb.net
 
Gracias por tu visita. Un saludo cordial
 
Publicar un comentario

<< Home

Powered by Blogger